Latidos distantes, lágrimas golpeando la persiana, sueños amaneciendo resacosos. Golpes sobre suelo mojado. Alquimia alimentando mis Demonios, soy yo el muerto que no resucitó. Soy el hijo prodigo que no volvió. El juego perdido que se tragó el Sofá. El final del Túnel sin Luz. Una vida para Vivirla, una vida para Morirla, una Vida para Gobernarla...
"Capitán Siempre de Mis Tempestades"
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